Ley de humedales

Desde febrero más de once mil focos de incendios arrasaron con miles de hectáreas en la zona del Delta del Paraná. Actualmente se debate en el Congreso una Ley de Humedales y alrededor de esta disputa se definen intereses, modos de vida común y de comprender a la naturaleza.

Los humedales son ecosistemas con enorme valor biológico, social, cultural y económico. Son parte integral de los siste- mas naturales que hacen posible la Vida en la Tierra.

Pero los humedales se pierden y degradan cada día. La Convención Ramsar estima que en los últimos 300 años ha desaparecido el 87% de la superficie de humedales a nivel global, con pérdidas del 35% desde 1970.

Los humedales se perciben aún como tierras de descarte, terrenos que son nece- sario rellenar, trayendo aparejado negativos impactos socioambientales.

Entre los principales impulsores de la pérdi- da de humedales se encuentran la agricultu- ra y ganadería industrial, la minería y otras industrias extractivas, la urbanización, las especies exóticas invasoras, el cambio climático, y el desecho de residuos domésti- cos e industriales sin tratar o deficientemen- te tratados.

Es necesario instalar la importancia de los humedales y la necesidad de protegerlos en la agenda política de los gobiernos.

Argentina tiene una gran diversidad y rique- za de humedales, estimándose que cerca del 21% de su superficie incluye ecosiste- mas de humedal.

El país no es ajeno a las presiones identifica- das a nivel mundial que están causando la desaparición y degradación de los humedales.

Por eso, Argentina necesita una Ley de Humedales Ya! que establezca presupuestos mínimos de protección ambiental para estos ecosistemas, que sea fruto de una amplia y efectiva participación, integrando la visión desde los territorios, de las personas que habitan, trabajan y conocen los humedales.

Una Ley de Humedales necesita regirse desde una visión ecocéntrica, y bajo princi- pios tales como el ecosistémico, preventivo, precautorio, de no regresión, equidad inter- generacional, transparencia y participación, perspectiva de derechos, y protección de los bienes comunes.

Una definición precisa de humedales, una autoridad de aplicación nacional con facul- tades proactivas e integrales, partidas presupuestarias a la altura de los desafíos, el desarrollo de un inventario y ordenamien- to territorial de los humedales, el reconoci- miento de contribuciones ciudadanas, y la visibilidad y promoción del respeto al patri- monio natural y cultural de los humedales son algunos de los elementos vertebrales de una ley nacional.

Una implementación efectiva y satisfactoria de la Ley de Humedales requerirá de ejes de trabajo estratégicos tales como la conserva- ción de humedales de valor para la biodiver- sidad; un uso ambientalmente respetuoso de los humedales y la restauración de aque- llos degradados; claridad jurídica en el acceso y tenencia de la tierra y a los bienes naturales; apoyo a la investigación científica, conocimientos tradicionales y ciencia ciuda- dana; un trabajo colaborativo con otros planes, programas y proyectos de gobierno; el monitoreo y evaluación de los objetivos y metas establecidos; la concientización y educación ambiental, y la generación de capacidades y fortalecimiento institucional.

Fuente: www.leydehumedalesya.org